20141018_6907

De inspiraciones y coincidencias a propósito de Ruscha

Hay instantes de falsa inspiración en los que se te enciende la bombilla (que debía ser de las baratas de los chinos en este caso por su corta duración), en que piensas que has tenido una idea original para un mini-proyecto fotográfico (proyecto, serie, tema… no voy a entrar en matices terminológicos). Lo planteas en tu cabeza, lo visualizas incluso, tienes el “qué” y el “cómo”, te pasas unas horas en el Google Maps buscando localizaciones cercanas (por eso de tener también el “dónde”) e incluso haces unas primeras fotos en cuanto encuentras un rato libre en ese momento del día adecuado para el “cuándo”.

Tras esa primera sesión de aproximación, vuelves a casa y haces una preselección y procesado de alguna fotografía que se aproxima a lo que viste en ese momento de lucidez visionaria. No está mal del todo, piensas, pero la bombilla comienza a perder su brillo poco a poco. Algo te has dejado en el proceso y comienzas a tener esa sensación similar al momento en que cierras la puerta de casa antes de salir de viaje convencido de que te has olvidado de meter algo imprescindible en la maleta.

Por la noche, cuando la bombilla inspiradora por fin ha agotado su corta vida, y ya no ciega con su falso brillo tu lucidez, te asalta la pregunta: ¿No habrá hecho alguien ya exactamente esto mismo? Toca encomendarse a San Google, tecleas unas pocas palabras clave y… ¡tachán! No es que alguien haya hecho algo parecido con anterioridad, es que son varios, y no algo parecido, sino exactamente lo mismo y con el mismo título.

Esto en concreto es lo que me pasó a mí el otro día cuando pensé en hacer un pequeño y humilde homenaje al trabajo de Ed Ruscha y sus “Twentysix Gasoline Stations” (tan inspirador para la “New topographics” y sus fotógrafos, de muchos de los cuales me declaro fan incondicional), pero llevándomelo a otra de mis fijaciones, los abandonos, de tal manera que quedara algo así como “Twentysix abandoned gasoline stations” o lo que es lo mismo: “Veintiséis gasolineras abandonadas”.

Y esto otro es lo que me encontré en Google cuando, ya por la noche, me dio por investigar un poco:

- Jeff Brouws: Twentysix Abandoned Gasoline Stations

- Eric Tabuchi: Twentysix Abandoned Gasoline Stations

- Iñaki Bergera: Twentysix (Abandoned) Gasoline Stations

¿Casualidad? Estoy convencido de que así es. Lo mismo que yo no tenía referencia de estos tres trabajos que he enlazado, ellos no tenían por qué tenerla en el momento de realizarlos. El asunto da para plantearse cuestiones varias acerca de la originalidad y la imitación, de la inspiración buscada y la inspiración subconsciente, e incluso para temer que, como dice Fontcuberta, tal vez todo esté ya fotografiado. Personalmente, la explicación que le doy es bastante más sencilla: partiendo del conocimiento de las veintiséis gasolineras de Ruscha, y de la voluntad de querer realizar un homenaje a dicha obra (en los tres casos expuestos no sólo no se disimula esa inspiración, sino que es el motivo per se del proyecto) un mismo proceso de reflexión puede llevar a un mismo tipo de conclusión. Otro camino de pensamiento diferente podría llevarnos a cambiar no ya el estado de conservación de las gasolineras, sino el sujeto a fotografiar, como en estos parques de bomberos, también de inspiración Ruschiana.

En cualquier caso, ni es asunto nuevo, ni exclusivo de la fotografía ni derivado de la expansión y democratización de la misma, ya escribió Publio Terencio Africano (? – 159 a.C.) que “Ya no se puede decir nada que no haya sido dicho antes de nosotros”.

Visto todo lo anterior, mis gasolineras abandonadas quedan abortadas casi en el momento mismo de haber sido concebidas (por lo menos como serie de veintiséis, y como búsqueda activa de las mismas, que no voy a dejar de fotografiar gasolineras si me las encuentro). Los tres son fotógrafos de gran nivel, que juegan en otra liga diferente a la mía, y no veo que yo pueda aportar nada nuevo al asunto, así que toca disfrutar de sus fotografías, las cuales os invito a ver ya que son merecedoras de dedicarles un rato.

Y para que no caiga en saco roto el ratillo que le dediqué al tema, aquí dejo tres bocetos de la única gasolinera que llegué a fotografiar, a modo de testimonio.

3

3 comentarios en "De inspiraciones y coincidencias a propósito de Ruscha"

  1. Epa, Dani.

    Veo dos cuestiones aquí. La primera es la terminológica, que intentas evitar al principio, pero yo entro al trapo. ;)

    Un proyecto es algo más que una serie, al menos en la cabeza de quien lo crea. Una serie puede sostenerse sólo con fotografías que comparten algo, un tema u otro elemento común menos potente (un color? un guiño?) pero un proyecto lleva inherente un mensaje más profundo. A veces no soy capaz de diferenciar una del otro, pero eso puede ser un problema mío (al no contar con suficiente bagaje para reconocer algo más allá de lo obvio) o de cómo estén hechos.

    En cuanto a lo de hacer un proyecto que ya se ha hecho antes lo veo así: una cosa es repetir el tema y otra hacer un proyecto que ya se haya hecho antes. Estoy seguro de que si te animases a concluirlo el mensaje que yo sacaría del tuyo sería muy distinto del que intuyo en los ejemplos (por cierto, el de Eric Tabuchi me deja frío y el de Jeff Brouws como el de Iñaki Berguera me encantan y me parecen completamente distintos). Me quedo con lo que siento al ver las fotos, con el mensaje (si es que lo hay) en lugar de simplificarlo a si he visto algo parecido antes. En pocas palabras: veo un proyecto como un mensaje, y creo que puede haber tantos mensajes como fotógrafos comprometidos con eso de encontrar su lenguaje propio (aunque hablen de lo mismo que otros).

    He dicho. ;)

    Gracias otra vez, Dani.

    Jota.

  2. Gracias por el pedazo de comentario, Jota, te lo has currado más que yo el post. Lo de la terminología no quise meterme porque no era el tema del post, pero sí que hay bastante confusión muchas veces entre proyecto y serie… yo lo entiendo bastante parecido a como dices.
    Alguien me dijo anteayer, tras haber leído este post, que “si algo es bueno, resulta nuevo”, tiene relación, supongo, con lo que dices de que lo importante es el mensaje… En cualquier caso, fotografíe o no gasolineras abandonadas si me las encuentro, lo que tengo claro es que no será en un proyecto de 26 gasolineras abandonadas, no creo que pueda aportar nada nuevo al tema.
    ¡Abrazo!

  3. Saludos! He caído en esta entrada tras mucho rato dando tumbos de blog. Encuentro que hay demasiados blogs de fotografía “convencionales”. Pocos en los que se ofrezcan reflexiones personales y, además, útiles. Importante la terminología, sí. Aunque yo veo que la elección de un tema no tiene por qué determinar nada. Precisamente el concepto de “género” muchas veces se asimila al concepto de “tema”. La mirada de uno mismo es la que marca la diferencia. Ciertamente, “lo nuevo” no existe propiamente. Lo nuevo es aquello que expresa nuestro ser. Si nuestro ser se expresa por la foto, habremos conseguido algo nuevo y genuino.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>

20140816_3342
Si no puedes con tu enemigo, fotografíalo.

Una pequeña reflexión post-vacacional, ya que, con mayor o menor intensidad, esto es lo que experimentamos muchas veces cuando vamos...

Cerrar